Viktor y Angélica terminan cenando con Rubín y Rocío. El anticuario se las arregla para recuperar el cuadro mientras que el periodista, incómodo con Rocío, acaba quedando con Héctor y repasando con él el caso que investigaba Adolfo cuando murió.

Armenteros, cada vez más tenso por su situación laboral, ha de ser asistido por Alberto para no perder los nervios. Finalmente el Teniente Coronel contactará con Clint mientras que Alberto aprovechará la coyuntura para cerrar la búsqueda de la caja de seguridad.

La cuña publicitaria de Manolita ya no tiene el interés de sus comienzos y eso afecta a la mujer, y más cuando Marcelino parece anteponer el fútbol a ella. Teodoro convence a Pelayo para que done la sangre y este acaba poniendo el dinero ganado en una cuenta para sus nietas y nieto.

Eso sí, a Teodoro no lo quiere ver más en relación al asunto de las donaciones.